El año pasado el grandioso Lux Interior nos abandono, pero sin duda su espíritu no ha abandonado este planeta y se ha metido en el cuerpo de 6 jóvenes vieneses, si lo sé es bastante exagerado decir que esta banda sea la reencarnación de The Cramps, pero no se puede negar que esta banda tiene bastante talento y sabe lo que quiere, con sus guitarras 60’s y sus pianos que toman la psicodélia de The Doors y las tinieblas de The Cramps, los ha convertido en la banda austriaca más salvaje en directo de todos los tiempos.
Ahora entro en un dilema, por un lado quiero que lleguen a ser más reconocidos para que así el mundo deleite la delicia de su música, y por otro lado quiero ser un poco egoísta para que la fama no los perturbe y sigan haciendo lo que más les gusta tocar rock and roll primitivo y beber alcohol gratis.